Altos de Tamarón

Fuego & Hielo

Lo mejor sucede cuando los opuestos se unen.

Son muchos los factores que hacen los vinos de Altos de Tamarón únicos y excepcionales. Destacaríamos sobre todo el contraste climatológico. Nuestra gama de vinos es el resultado de un clima casi extremo, y es en esta «adversidad» donde se vuelven especiales, ya que el importante contraste térmico entre el día y la noche de la zona, especialmente durante la maduración de la uva, genera una piel dura y fuerte que da como resultado vinos llenos de color, estructura y casta. El frío intenso retrasa el brote de la vid y los bruscos cambios de temperatura, provocan un perfecto equilibrio del fruto durante su maduración. En vendimia y ya en otoño se recoge una uva de una magnífica calidad.

Unas condiciones únicas

Personalidad propia del terruño

Los suelos cuentan con sedimentos de arenas limosas o arcillosas, con alternancia de capas calizas y calcáreas. La cuenca ribereña presenta ondulaciones en su paisaje, con cotas que van desde los 911 metros de altitud en los páramos hasta los valles que discurren junto al río. El tiempo y el legado de la naturaleza han dotado a toda la zona de un suelo excepcional para el cultivo de la vid.

Climatología

El clima es mediterráneo con carácter continental. Con un promedio moderado-bajo de lluvias al año, veranos secos e inviernos largos y rigurosos, con acusadas oscilaciones térmicas a lo largo de las estaciones. Son, precisamente estas las que van a ayudar a la uva a desarrollar una piel fuerte, capaz de soportar las inclemencias del tiempo para proteger el fruto hasta la vendimia. La pluralidad del tiempo marca contrastes imprevisibles que alteran el curso normal de los viñedos, dándoles un carácter y fuerza que los hace únicos.

Perfecta adaptación de la uva Tempranillo

El desarrollo que tiene el varietal español por excelencia en esta zona, ofrece la particularidad de dar racimos compactos y de tamaño medio. Las características de los vinos son una fuerte coloración violácea, aromas a frutos negros del bosque y taninos estructurados con acidez media.

Denominación de Origen y Viñedo

La Denominación de Origen Ribera del Duero está localizada en el Norte de España y comprende las provincias de Burgos, Segovia, Soria y Valladolid. Estas provincias unen a lo largo del río Duero más de 100 pueblos que comprenden una franja vitícola más de 100 kilómetros. Los orígenes, se remontan a más 2.500 años donde encontramos la primera referencia vinícola de la zona: en el yacimiento Pintia, donde ya se identificó la presencia de residuos de vino y que confirma que ya desde entonces se conocía y se consumía vino. La Denominación de Origen, surge tras la iniciativa de viticultores y bodegueros locales que se aunaron con el objetivo de impulsar la calidad de los vinos de la Ribera del Duero.

Desde entonces y hasta hoy se cuida y supervisa toda la elaboración, crianza y comercialización de los vinos amparados bajo esta Denominación. La característica principal es la limitada producción de uva ( 7.000 kg. por hectárea) y el seguimiento de las variedades de uva autorizadas y a que se limita la producción de cualquiera de sus vinos: Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot, Malbec, Garnacha Tinta, Albillo Mayor

Todo este esfuerzo y cuidado ha dado como resultado convertir a esta Denominación de Origen en una de las denominaciones geográficas españolas más reconocidas a nivel internacional.